El pasado viernes 12 de enero, el equipo de la CONASAMA liberó el material referido a la conferencia Consideraciones especiales en la evaluación y tratamiento de víctimas de abuso sexual infantil con algún tipo de discapacidad. El contenido estuvo a cargo de la Mtra. Nadya Arroyo Estrada, experta en sexualidad y discapacidad.
SEXUALIDAD Y DISCAPACIDAD CARAS DE UNA MISMA MONEDA
Arroyo inició la conferencia reconociendo la complejidad existente en la sociedad actual para hablar de sexualidad y discapacidad, y más aún, el tema del abuso sexual en personas con discapacidad.
El concepto de discapacidad es un término general que abarca las deficiencias, las limitaciones de la actividad y la restricciones de la participación. Las diferencias son problemas que afectan a una estructura o función corporal; las limitaciones de la actividad son dificultades para ejecutar acciones o tareas, y las restricciones de la participación son problemas para participar en situaciones vitales.
Por consiguiente, la discapacidad es un fenómeno complejo que refleja una interacción entre las características del organismo humano y las características de la sociedad en que vive.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la vida sexual como "todo acto sexual, la tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de esta con la víctima, en cualquier ámbito, incluidos el hogar y el lugar de trabajo".
La coacción puede abarcar:
- Uso de grados variables de la fuerza
- Intimidación psicológica
- Extorsión
- Amenazas (por ejemplo de daño físico o de no obtener un trabajo o una calificación, etc.)
También puede haber violencia sexual si la persona no está en condiciones de dar su consentimiento, por ejemplo, cuando está ebria, bajo los efectos de un estupefaciente, dormida o mentalmente incapacitada.
La definición de la OMS es muy amplia, pero también existen definiciones más circunscritas. Por ejemplo, para fines de investigación algunas definiciones de la violencia sexual se limitan a los actos que incluyen la fuerza o la amenaza de violencia física.
El estudio multipaís de la OMS definió la violencia sexual como actos en los cuales la mujer:
- Fue forzada físicamente a tener relaciones en contra de su voluntad
- Tuvo relaciones sexuales contra su voluntad por temor a lo que pudiera hacer su pareja
- Fue obligada a realizar un acto sexual que consideraba degradante o humillante
MITOLOGÍA DE LA SEXUALIDAD EN PERSONAS CON DISCAPACIDAD
Fue proyectado el video "Mitología de la sexualidad especial" durante la conferencia. En este material se propuso recorrer la historia humana universal siguiendo los procesos evolutivos que ha experimentado la visión social hacia las personas con diversidad funcional o discapacidad, basada en la mitología como un lenguaje universal.
Desde la fundamentación antropológica consideran necesaria la fundamentación respecto de los orígenes que han llevado a encasillar a las personas con discapacidades, ver en qué manera la historia universal ha influenciado e influencia la historia personal y la visión social de las personas con diversidad funcional.
La historia en el arte muestra la antigua fascinación por los sujetos corporalmente diferentes. En todos los tiempos históricos las sociedades han producido sus propias formas o vías de discapacidad encubriendo de mitos la discapacidad funcional. A lo largo de la historia humana han existido, y con seguridad coexisten diversas concepciones respecto de la discapacidad que se reflejan en verdaderas construcciones mitológicas referidas a estas personas.
Los mitos son expresiones del inconsciente colectivo, se expresan a través de los arquetipos que son formas simbólicas que permiten al hombre enfrentarse con lo real.
El fenómeno por la atracción hacia lo diferente es conocido desde la antigüedad como monstruosidad. La ciencia teratológica es la encargada de estudiar la ordenación de los monstruos. Etimológicamente, monstruo significa "aquel que revela", "aquel que advierte", "el que nos muestra desde esta perspectiva", el monstruo nos revela un supuesto estado de desorden alterando todo aquello que consideramos normal.
Focualut escribió en Los anormales "los monstruos son el sonido de fondo en el murmullo interrumpido de la naturaleza", el monstruo nace del imaginario colectivo a partir de la diferencia -casi siempre corporal- que se muestra evidente.
La cuestión terminológica en el abordaje de la historia de la discapacidad no es, en absoluto, neutra y nos remite a debates ideológicos. Existen numerosos términos, supuestos sinónimos o antecesores de los términos discapacidad o diversidad funcional. Planteándonos concretamente la mitología en discapacidad podemos decir que cada mito es ante todo un lenguaje.
Existen en castellano muchos términos utilizados a través de la historia para referirse a las personas con discapacidad: impedido, mutilado, lisiado, inválido, asimétrico, disminuido, retrasado, oligofrénico, imbécil, idiota, débil, fronterizo, bobo, tonto, tarado, deforme, tullido, impedido, estigmatizado, discapacitado. Esta terminología coincide con la rotulación que indistintamente se ha sometido a las personas con discapacidad, respondiendo a la necesidad humana de dar nombres. Los medios sostenidos para categorizar a estas personas varían de acuerdo a la visión que de estos tenga un determinado tiempo histórico.
De acuerdo al proceso histórico, las personas con discapacidad han sido vistas como seres invisibles, se les ocultó en cuevas, leprosarios, manicomios, autobuses especiales, centros y escuelas especializadas, permanecían en sus casas en el cuarto trasero o en una silla en la acera sin otra función que contemplar a los transeúntes. También como fetiches sociales.
Numerosas tribus aborígenes integraban a cualquier ser transformado por diferente a sus sociedades pues creían que espantaban a los malos espíritus, de allí el cuidado que les prodigaban. Aparece la visión social de la discapacidad como bendición o como castigo, como es el caso de Esparta donde los recién nacidos que presentaban capacidades físicas se los arrojaba al vacío.
Los mitos se reproducen en la actualidad, ya no en expresiones simbólicas sino en exigencias y normas sociales, prejuicios, leyes, estereotipos. Se utilizó la imagen conmovedora y desamparada para vender al minusválido de diferentes maneras: como personaje malvado violento y autodestructivo o como víctima sumisa que lucha contra lo imposible desde su extraordinaria bondad e inocencia cargando las tintas a menudo sobre cuestiones emocionales de amargura y superación al tiempo que se silencian problemáticas sociales y la falta de sus derechos civiles que llevan a la marginación.
La historia antigua del hombre se está redescubriendo en la actualidad en las imágenes simbólicas y mitos que han sobrevivido al hombre antiguo. Cuando leemos los mitos de los antiguos griegos o las narraciones populares de los indios americanos, en general, no somos capaces de relacionarlos con nuestras actitudes del presente. Sin embargo, los símbolos que representan no han perdido su importancia par la humanidad. La mente del hombre moderno conserva la capacidad de crear símbolos, que en otros tiempos encontró en las creencias y ritos del hombre.
El , no porque imponga un sentido único a los hombres sino porque sugiere sentidos diferentes a un hombre nuevo. De allí, el rechazo a todo individuo que entre en conflicto con el orden vigente. Los medios sociales de legitimación y mantención de normas, leyes y posturas son variados; por ende, los estereotipos de cómo debe ser un individuo se mantendrán o no en tanto las actitudes así lo determinen.
Todo pueblo tiene su propio mito, toda familia, grupo humano, toda persona lo tiene. En las últimas décadas se han revalorizado la funciones del mito, no como fantasía sino como una verdadera formulación cultural. Jung y sus seguidores han demostrado que, irrefutablemente, la lógica, los héroes y las hazañas del mito sobrevienen en los tiempos modernos. Como actualmente se carece de una mitología general afectiva, cada uno de nosotros tiene su manteón de sueños privado, inadvertido, rudimentario, pero que obra en secreto.
MODELO ECOLÓGICO
Posterior a la reproducción del contenido en video, la Mtra. Arroyo invitó a revisar como en la historia de la familia o de la sociedad, todavía se ve a las personas con discapacidad como personas asexuales. Realizó una introducción al Modelo ecológico relacionado con los sistemas que rodean a una persona.
Recuperó la aportación de la OMS en cuanto a la definición de discapacidad, calificándola de importante al afirmar que es la condición de la persona en interacción con los distintos espacios sociales donde se desarrolla. Se habla de un modelo ecológico que lleva a pensar en acciones de prevención e incidencias que sólo tienen que ver con la persona con discapacidad olvidando la interacción de la mismas con otros sistemas, entonces las estrategias de prevención e intervención también deben ir en los demás sistemas que rodean a las personas con discapacidad.
Muchas de las situaciones que suceden con las personas con discapacidad no están directamente relacionadas con la condición de discapacidad, sino que son muchas situaciones que suceden en otros sistemas que son invisibilizados porque la mitología de la discapacidad dicta que la persona es un "enfermo que hay que curar". La atención y recursos se focalizan en las personas con discapacidad. Incluso muchas situaciones de abuso se presenta en las instituciones donde acuden a recibir atención.
Los protocolos inexistentes de detección de abuso sexual no existen porque no parecen necesarios porque se piensa que tienen otras prioridades. El enfoque médico rehabilitatorio no se ha logrado superar donde se cree que las necesidades más importantes van al abordaje de la limitación o la diversidad funcional como si fuera lo único que requiere para interactuar con los demás dejando de lado la sexualidad.
El modelo ecológico rompe con la idea de que la experiencia de abuso sexual únicamente se analiza desde la persona y perdiendo de vista todo lo que le rodea. Se tiene que involucrar todos los sistemas de la misma manera para crear los factores de protección y revertir la mitología. Al llegar al macrosistema y se logra modificar la visión de la discapacidad va a llegar al sistema persona o del individuo, le impactará en su persona porque tendrá impacto en presupuestos, programas gubernamentales, impartición de justicia.
FACTORES DE RIESGO
Los factores de riesgo incluyen al miedo, la ignorancia, el analfabetismo en sexualidad, por citar algunos. Debido a la neurodivergencia, a muchas personas con discapacidad les cuesta trabajo establecer un límite.
Desde la mirada del "normalocentrismo" se suele vender la idea de que las personas con discapacidad no pueden poner límites porque siempre van a requerir ayuda o dependencia del cuidador (a).
Al disociar que existe la discapacidad y el abuso sexual, al ignorar o invisibilizar que las personas con discapacidad, las personas y las instituciones no creen sea un fenómeno que valga la pena estudiar, que se tenga un registro cuantitativo. Existe una ausencia de investigaciones.
Al relacionar el tema de abuso sexual infantil con el de niñez con discapacidades como un solo, resulta casi impensable para la gran mayoría. Solo asumir que el abuso sexual infantil es una problemática que forma parte de la realidad mexicana resulta complejo. Invisibilizar el tema hace que se invisibilicen los recursos.
Muchos de los abusados ni siquiera son conscientes de ser víctimas de estas prácticas, comenta la psicóloga Pepa Horno, de la Organización Internacional "Save the Children". Los niños con retraso mental sufren con mucha más frecuencia estos abusos, especialmente en edades comprendidas entre 6 y 11 años. El riesgo ante estos abusos aumenta de forma importante en la adolescencia y continua en la vida adulta (Furey, Sobsey y Mansell, 1997).
Los abusos se presentan con mucha frecuencia en un contexto de "afecto", ofreciéndole el agresor atención, cariño, comprensión, premios de diferente tipo e incluso placer. Este contexto en la relación de abuso, especialmente si se trata de personas con carencias afectivas, puede llevarles a colaborar con el agresor, que percibe como amigo.
Los agresores consideran a las personas con retraso mental más fáciles e interesantes. Una asociación de agresores aconsejaba a sus afiliados buscar menores Síndrome Down porque:
- Son muy afectuosos
- Son fáciles de manejar
- No denuncian o no les creen
Numerosas personas tienen acceso directo a su cuerpo para ayudarles a unas cosas u otras. Por esta razón están muy acostumbrados a que los demás accedan a su intimidad. Hay datos que ponen de manifiesto que una cuarta parte de los abusos sexuales a niños (de 14% a 33%) son realizados por cuidadores (Sobsey y Randall, 1997).
Mediante una tabla de doble columna, la ponente compartió un ejemplo de cuánta gente tiene acceso a una persona con discapacidad y una persona sin discapacidad:
Después, fue presentado el video "Romper el silencio y vivir sin violencia" con el cual se invitó a los presentes a tomar nota sobre los factores de riesgo. El abuso sexual infantil y la discapacidad a menudo existen juntos, lo cual no significa que haya un nexo directo entre ambos. Como sostiene Dick Sobsey es el contexto social el que lleva al abuso de las personas con discapacidad y no a la discapacidad misma. Es decir, que es un error creer que la discapacidad es la causa del abuso sexual.
En lo relativo a los efectos y consecuencias por abusos y agresiones sexuales en las personas agredidas, estos son en gran manera desconocidos. La poca investigación que se ha llevado a cabo matiza que generan trastornos profundos que permanecen mucho tiempo después de haberse producido. Se ha encontrado amplia prevalencia de trastornos psiquiátricos (Bailey, 1998).
Entre las reacciones más frecuentes recogidas en algunos estudios aparecen: ansiedad, culpa, agresividad, delincuencia, problemas de adaptación social, disminución de la autoestima y conductas repetidas de imitación del ataque sexual. Algunos niños reaccionan entre un episodio de incesto cerrándose a estados psicóticos tales como períodos de confusión prolongados y rabia (Amerman, 1994).
Ante los casos que se van presentando es importante realizar acciones para el desarrollo de independencia. La dependencia de los cuidadores puede fomentar la sumisión a los mismos facilitando el abuso sexual, es conveniente lograr en la persona con discapacidad:
- Desarrollo de habilidades para la vida independiente
- Habilidades de comunicación con medios alternativos
- Habilidades sociales: reconocer y poner límites
Otro ejemplo para el desarrollo de factores protectores se presenta cuando la persona con discapacidad tiene miedo a denunciar el abuso por la posibilidad de la pérdida de los vínculos y la provisión de cuidados. Es conveniente que exista:
- Conocimiento de sus derechos
- Mecanismos de denuncia diferenciados
- Servidores públicos sensibilizados y capacitados
- Protocolos de actuación para protección de personas con discapacidad
- Refugios para personas con discapacidad
En un caso cuando se cree que por el hecho de tener una discapacidad visual va a significar la imposibilidad de identificar al agresor, es conveniente:
- Capacitar a servidores públicos
- Generar investigación en diversas disciplinas que permitan distintos mecanismos de reconocimiento de agresores distintos a la visión
Cuando existen dificultades de comunicación que puedan o no tener su grado o tipo de discapacidad y la falta de un lenguaje apropiado para comunicarlo en algunos casos, será conveniente:
- Desarrollo de habilidades de comunicación alternativas
- Uso de tecnologías
Es posible que se presenten casos donde haya falta de información sobre la sexualidad y las relaciones personales unido a la falta de oportunidades sociales, el aislamiento y su mayor proclividad a dar y recibir afecto, generan situaciones ambivalentes para ellas que pueden derivar en formas de abuso sexual. En ese caso, es conveniente:
- Educación de la sexualidad
- Campañas informativas dirigidas a personas con discapacidad
- Personal capacitado
- Material didáctico adaptado
Cuando se cuenta con un nivel alto de lenguaje, se pueden presentar problemas para manejar la distancia social (comportamientos seductores) y los afectos, por lo que el abusador puede acusarlos de que el contacto sexual es querido, buscado y provocado por la víctima, como una característica más de su propia discapacidad. Es conveniente desarrollar lo siguiente:
- Noción de lo público y lo privado
- Poner límites
- Distinción de alternativas para acercarse a las personas y/o maneras en que las personas pueden acercarse
- Masturbación como mecanismo de descarga sexual
- Tocamientos permitidos en los diferentes tipos de vínculo
Por la menor credibilidad que se les atribuye a la hora de denunciar hechos de este tipo ante algunos estamentos sociales, es necesario desarrollar:
- Mecanismos de denuncia diferenciados
- Peritos especialistas en discapacidad
- Ruta crítica diferenciada
La tradicional educación de "obedecer al adulto y someterse a sus indicaciones" se hace más patente en mujeres y niñas con discapacidad, en especial la psíquica:
- Autodeterminación
- Autonomía
- Toma de decisiones
- Aprender a decir NO
- Respetar el NO de las personas
En el caso de mujeres y niñas con discapacidad intelectual, éstas suelen confiar más en desconocidos y presentan más dificultades para discriminar estas conductas. A menudo, no tienen ni siquiera conciencia de anormalidad en lo que viven a diario. Se recomienda:
- Enseñar los diferentes vínculos con las personas: familia nuclear, familia extensa, conocidos, desconocidos
- Simulación de situaciones reales
Con respecto a los materiales adaptados, la conferencista compartió una ruleta en función de los tocamientos, formas de saludar y expresar afecto. Se trabajan partes del cuerpo, partes públicas y partes privadas. Este ejemplo es una acción para enseñar a las personas con discapacidad sobre la privacidad. Destacó la presencia de un pensamiento concreto en estas personas, quienes suelen generalizar si así se les indica.
Ante la necesidad de contar con materiales los sistemas de salud deben ofrecer las herramientas para hacer las intervenciones con discapacidad.
Sobre la calidad de vida, una persona con salud sexual óptima tiene autodeterminación, conoce sus derechos, se siente bien emocionalmente, es incluido socialmente, tiene un desarrollo personal aceptable, sabe relacionarse interpersonalmente con otros, tiene bienestar material, están satisfechas sus necesidades básicas, tiene un bienestar físico.
Debemos generar los medios para que las personas con discapacidad tengan herramientas y experiencias de modo que estén empoderadas y puedan tener experiencias para afrontar.
Sesión 0. Formación de líderes promotores de infancias y adolescencias seguras en educación básica (consultar).
Sesión 1. Conductas saludables y no saludables de la sexualidad acorde a la edad (consultar).
Sesión 2. Conceptos generales sobre el abuso sexual infantil (consultar).
Sesión 3. Panorama epidemiológico del abuso sexual en México y el mundo (consultar).
Sesión 4. Aspectos legales de la violencia sexual y basada en género contra NNA (consultar).
Sesión 5. Alteraciones físicas asociadas al abuso sexual infantil (consultar).
Sesión 6. Alteraciones neurofisiológicas y anatómicas asociadas al abuso sexual infantil (consultar).
Sesión 7. Evaluación clínica del abuso sexual infantil. Manifestaciones a corto y largo plazo (consultar).
Sesión 8. Modelo de atención a víctimas de violencia sexual (consultar).
Sesión 9. Modelo de acompañamiento jurídico y psicológico de la Oficina de la Defensoría (consultar)
Sesión 10. Protocolos de Prevención y Actuación ante el Abuso Sexual Infantil, Maltrato y Acoso Escolar en las Escuelas de Educación Básica de la Ciudad de México (consultar)
Comentarios
Publicar un comentario
Escribe aquí un comentario.